AMO A OSHO

TRES SIMPLES, SENCILLOS Y PROFUNDOS CONCEPTOS DE UN MAESTRO: OSHO

¿Por qué amo a OSHO?

Porque es único.

Sus ideas son geniales, simples, efectivas y profundas… solo hay que ponerlas en practica.

Muchas veces he hablado en la radio de Osho, recomendando libros y temas tratados por el, y muchas personas también me han llamado porque no lo comprenden. Osho tiene eso.

Llega o no llega y cuando no llega, es porque no es el momento preciso para “llegar”.
Mi primer libro de Osho me lo regalo una gran amiga… Carmen, cuando cumplí 27 años.
Durante mucho tiempo no pude pasar de la pagina tres. Ella me instaba a leerlo y a mi me parecía insoportable. No lo comprendía. El libro era “Y llovieron flores…”… ni el titulo me llamaba la atención.

Un día deje de intentarlo.

Tres o cuatro años después, frente a una enfermedad que me obligo a quedarme en cama durante varios días lo volví a abrir…y amigos, LLOVIERON FLORES…

Como un acto mágico entro OSHO a mi vida.

Es “incomprensible” como tres o cuatro años antes no podía entenderlo.

ERA TODO TAN CLARO… ¿Saben porque? Porque como bien dice el antiguo axioma ocultista “CUANDO EL ALUMNO ESTA PREPARADO, LLEGA EL MAESTRO” y el maestro llego a mi vida para nunca abandonarme.

Mis mas sinceros deseos es que llegue a la suya y mi intento es poner en sus manos estos tres conceptos cortos, para que luego – si llegaron a Ud. – profundice con los cientos de libros que hay en el mercado.

Es verdad… todos no son claros.

En realidad OSHO nunca escribió ningún libro.

El material que se encuentra es una recopilación de las miles de conferencias que el dio.

Si tiene dudas, si desea algún titulo simple y sencillo como para “iniciarse”, escríbame… le puedo aconsejar e incluso, mandar uno vía mail para que lo lea y si le gusta…
PARA QUE LO COMPRE, porque a los libros hay que tenerlos en la mano, señalarlos, abrirlos y cerrarlos para volver a abrirlos y seguro, cada vez que lo vuelva a leer, volverá a encontrar distintos significados.

PRIMERO:

En un momento dado estaba ahí y al momento siguiente se ha ido.
En un momento estamos aquí y al siguiente momento nos hemos ido. Y para este simple momento cuando alboroto: tanta violencia, ambición, lucha, conflicto, ira, odio... ¡y todo por este pequeño instante!
Solo estamos esperando que llegue el tren en la sala de espera de una estación, pero armamos mucho lío: luchamos, nos hacemos diario unos a otros, tratamos de poseer, tratamos de dirigir, tratamos de dominar: todo es política.
Y entonces llega el tres y te habrás ido para siempre.

SEGUNDO:

Has contemplado alguna vez como desaparece la noche...
Muy poca gente se da cuenta siquiera de cosas que suceden cada día Has visto alguna vez la llegada del atardecer... la media noche con su canción... la salida del sol y su belleza. Nos comportamos casi como ciegos.
En un mundo tan hermoso vivimos en pequeños pozos, en los pequeños pozos de nuestras propias desdichas.
Es algo familiar, así que si alguien quiere sacarte de allí... luchas. No quieres ser sacado de tu infelicidad, de tu sufrimiento.
De cualquier modo, hay tanto gozo alrededor que basta con estar consciente de el y convertirte en un participante, no en un espectador.
La filosofía del zen es participación.
Participa de la noche que se va, participa del atardecer que llega, participa con los estrellas, participa con las nubes... haz de la participación tu estilo de vida y todo tu existencia se volverá un gozo, un éxtasis.
Nunca podrías haber imaginado, nunca podrías haber soñado un Universo mejor.

TERCERO:

Observa las olas del océano.
Cuanto mas alta suba la ola, mas profunda es la caída. En un momento dado eres la ola: al momento siguiente eres el vacío que le sigue.
Disfruta de ambos.. no te hagas adicto a ninguno de lo dos. No me digas: Me gustaría estar siempre en la cumbre. No es posible. Observa simplemente los hechos: no es posible.
Nunca ha ocurrido y nunca sucederá. Simplemente es imposible, no está en la naturaleza de las cosas.
Entonces que hacer ... Disfruta de las cumbres mientras duren y luego, disfruta de los valles cuando vengan. Que hay de malo en los valles Que hay de malo esta abajo Es una relajación.
Una cumbre es una excitación y nadie puede existir constantemente en una excitación.
La sabiduría mas grande para no tener prejuicios acerca de cualquier fenómeno en el desfile de tu vida, bien sean valles o cumbres, es que eso también pasará.
Celebra, di si y continua cabalgando por la vida.

Con mucho AMOR…

Walter Accuosto