CUANDO LO INESPERADO LLEGA,,,

Hola amigos, esta semana compartiré un cuento que les hará reflexionar y me permitirá desarrollar parte de mi filosofía de vida… que es tratar de estar,- desde donde uno se encuentre - física, vital, emocional o económicamente - lo mejor posible - y si no se esta, buscar las herramientas que le permita tener un poco mas de alivio porque todo, créanme amigos, todo es mejorable.
A veces “trabajar” sobre esta creencia es difícil porque cuando uno esta pasando situaciones tensas, criticas y dramáticas se inmoviliza y es justamente ese el momento de salir a buscar ayuda.

Si esta enfermo vaya al medico. ¿A quien si no?
Si esta deprimido decídase de una vez, rompa el temor que genera la palabra psiquiatra y vaya a verlo. La depresión es una enfermedad que se cura… si se sabe como hacerlo.
Si le duele una muela llame a su odontólogo,
Si se ve con algunos quilos de mas consulte con su nutricionista… hay profesionales que se especializan en distintos caminos.
Si es un problema espiritual y cree que una consulta a un sacerdote le podrá ayudar… no se quede con la idea, acérquese a él
y si piensa que una charla conmigo puede serle útil… bueno, aquí estoy, es fácil llegar a mí…

Lo que no puede hacer, es quedarse esperando a que las cosas se solucionen solas, porque mientras tanto va pasando la vida…

Una de las grandes causas que generan angustias, depresiones y no permiten ser feliz es que por lo general manejamos mal los tiempos.

Tan malo es quedarse enganchado con cosas del pasado que no se pueden cambiar, como preocuparse por adelantado por cosas que aun no han sucedido y esos dos canales, son los que con mas frecuencia veo en consulta.

No digo vivir al día y no planificar el futuro. Una de las cosas que enseño en consulta es como proyectar metas para alcanzar lo que necesitamos o deseamos… lo que digo es tener en claro que es el presente el único tiempo posible para disfrutar la vida…

Y un poco a eso, se refiere el siguiente cuento, que pertenece a una mujer muy especial: Silvia Freire, escritora, conferencista y maestra de vida, a la que realmente admiro y espero conocerla en mi próximo viaje a Buenos Aires… y dice así:

"""La mujer sabía que no contaría con nadie en su vejez.
Su marido había fallecido y no habían tenido hijos; su hermano, mucho mayor que ella, estaba radicado en el exterior.
Así que decidió vivir en completa austeridad, cuidando cada centavo.
Se asoció a la clínica más cara del país, con los mejores médicos, fue pagando por adelantado el mejor geriátrico, y ahorró cuidadosamente mucho dinero “por lo que pudiera pasar” dejando muchas veces de saborear un helado, comprarse un libro o salir con sus amigas.
Al cumplir 60 años, decidió festejarlos en su cuidad natal, así es que muy temprano salió en tren hacia su pueblo.
Luego de dos horas de viaje, sucedió lo impensable: el tren descarriló y todos los sobrevivientes (ella incluida) fueron llevados al hospital más cercano de un pueblo muy pobre, donde esta mujer, gravemente herida, pasó sus últimos días rodeada de algunas personas llenas de buenas intenciones, pero sobrecargadas de trabajo, sin gasas suficientes, ni medicamentos adecuados, ni televisor en la habitación privada como ella había planificado.
Antes de morir, recordó todos los años de privaciones y sacrificios que le habrían de garantizar lo que más tarde comprendió que nadie puede prever.
Que en paz descanse."""
...
Cuando leí este cuento me impacto.

Estas son las historias cortas que a mi me gustan porque actúan como disparadores, para hacernos dar cuenta que en realidad todo es tan simple, tan sencillo….

Que somos seres indefensos atados a un hilito a la vida…y sin embargo, nos creemos poderosos y que dominamos todo cuando en realidad, somos una hoja al viento, que nos lleva de aquí para allí sin preguntarnos si queremos ir o no.
Desde hace mucho tiempo, me conecte con la teoría de la reencarnación y comencé a comprender muchas cosas. Entre ellas dos ideas básicas; que TODO ABSOLUTAMENTE TODO LO QUE NOS OCURRE NOS DEJA UNA ENSEÑANZA.
Y QUE SOLO TENEMOS DOS OPCIONES: O IR POR LA VIDA PREOCUPADOS, LAMENTANDONOS, CON RABIA, QUEJANDONOS Y MALDICIENDO NUESTRA “SUERTE” … O CON LA SEGURIDAD DE SABER QUE LO QUE VIENE SERÁ PARA NUESTRO BIEN (porque Dios sabe porqué hace las cosas).

Los resultados que obtenemos en nuestra vida, tiene mucho que ver con la forma como la veamos. Si la ve como una lucha… estará luchando hasta que finalice su tiempo aquí en la tierra. Si la ve como un juego, fluirá y lo pasará bastante divertido. Si la ve como una oportunidad, estará creciendo permanentemente y conociendo nuevos caminos, personas y ENSEÑANZAS.
Pero siempre, lo que hará la diferencia...será la actitud que Ud. tenga frente a lo que le suceda.
Muchas veces la vida nos da cosas que no queremos. Cosas muy dolorosas.
Yo se que Ud. quisiera tener una vida perfecta… sin problemas, sin perdidas, sin enfermedad y sin sufrimientos… en la que pudiera elegir, - como quien lo hace de un menú de un restaurante, -“lo que le de la gana”, y dejar de lado lo que no le guste.
A mi también me gustaría… pero eso es imposible…
Por lo tanto - SIN DEJAR DE TRABAJAR EN LO QUE UNO QUIERE, CREE Y NECESITA… se tiene que tener la serenidad de aceptar las cosas como vienen, cambiar lo que se pueda cambiar y resignarse a lo que no.
Lo que intento trasmitirles esta semana es que viva lo mejor y feliz que pueda…. Disfrutando lo que tiene a cada momento y eso va a significar no ser tan rezongón, ni tan negativo, ni tan exigente, ni tan crítico,

El cuento con que abrí este espacio es mas que expresivo… cuando uno cree que tiene todo bajo control… aparece algo de golpe y lo modifica… y nos lleva a lugares, emociones, situaciones que nunca quisiéramos haber ido o nunca nos hubiéramos imaginado que nos podría pasar.

Yo se que en principio no deja un mensaje muy positivo… pero si miran bien, si me siguen semana a semana deberían sospechar porque lo hice…

Y que no fue para dejarles un sabor amargo en el alma… sino para que comprenda que no tenemos nada comprado, para que tome un poco de distancia y se de cuenta que todo pasa muy rápido y que hay que vivir lo mejor que se pueda y una de las maneras de hacerlo es separar lo importante de lo no importante, y gastar energía, tiempo y vida en lo que realmente importa…

El mensaje de esta semana es que respire hondo, mire por la ventana, sienta la vida alrededor suyo, y sea consciente que uno puede prever muchas cosas… pero no tenemos nada asegurado.

Y si estamos hoy, aquí y ahora… ¡vamos a pasar lo mejor posible!
¡Y también hacer pasar a quienes tenemos al lado lo mejor posible…! porque la vida es esto… nada más, ni nada menos que esto: Un RECORRIDO maravilloso en el cual estamos todos… Ud. y yo, interconectados y participando, así que: ¡MUY FELIZ VIAJE!

Walter Accuosto